infoinfusion 9 mayo, 2018 | Hace 6 años
Reproches por la denostación al trabajo de la representación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México por parte del gobierno de Enrique Peña Nieto, así como advertencias sobre un eventual carpetazo a la investigación sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, ante las posibilidades de que los constructores de la “verdad histórica” dejen el poder, fueron expuestas este martes en la audiencia de revisión del Mecanismo de Seguimiento en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La audiencia realizada en el contexto del 168º Periodo de Sesiones de la CIDH que se desarrolla en Santo Domingo, República Dominicana, es previa a un informe sobre el caso que rendirá la CIDH, y a una visita que se realizará en julio próximo.
La reunión presidida por la relatora de país, Esmeralda Arosamena, se tornó ríspida ante la ausencia de avances para localizar a los jóvenes desaparecidos hace 43 meses, y a unos meses de que se lleven a cabo elecciones en México, así como por el pronunciamiento emitido este lunes por el gobierno de Peña Nieto contra el informe “Doble injusticia”, presentado por la ONU-DH, en el que se documentan torturas a al menos 34 personas procesadas por el caso Ayotzinapa, entre ellas quienes supuestamente sustentan la “verdad histórica”.
El subdirector del Centro de Derechos Humanos Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), Santiago Aguirre, alertó a los comisionados acerca de que el “ataque” a la ONU-DH es consecuente con otras posiciones similares del gobierno de Peña contra el relator de la tortura de y hacia el Comité contra la Desaparición Forzada (CED), ambos de la ONU, y al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), actitudes “propias de un Estado autoritario”
Fuente: Proceso