infoinfusion 3 noviembre, 2017 | Hace 7 años
Muy inquietante resultó para la sociedad duranguense la información que se generara a inicios de semana y que tiene que ver con el traslado de este criminal, conocido en el mundo delictivo y viralizado en internet con el alias de “El Tato”, al Centro Federal de Reinserción Social número 14 ubicado en la ciudad lagunera de Gómez Palacio, y la verdad, es que no es para menos.
El historial delincuencial de este personaje es bastante amplio y no solamente por su trayectoria en las calles, sino además por los conflictos que ha ocasionado al interior de todos los penales en los que, ingresado con el nombre de Luis Alberto González Nieto, pero mejor conocido como “El Tato”, ha estado recluido en los últimos 10 años.
El delincuente ha estado preso por una década en 12 cárceles del Estado de México de las cuales, ha tenido que ser trasladado precisamente por su conducta al interior de las mismas, donde ha ocasionado terror y toda clase de problemática, cimbrando la seguridad de internos, afectando la tranquilidad de sus familiares quienes han sido extorsionados, exigiéndoles dinero a cambio de no lastimar sus parientes recluidos.
Este singular personaje se dio a conocer recientemente por un video que circuló vía redes sociales en internet, en el que se le aprecia junto con algunos de sus compinches torturando a otros reos en el penal de Chiconautla, en Ecatepec, Estado de México. El sujeto así se la ha llevado durante largos 10 años brincando de un penal a otro, acusado por delitos como ultraje, secuestro agravado, homicidio calificado, robo de vehículo con violencia y delincuencia organizada.
En enero del año pasado se determinó que todos los internos del Sistema Penitenciario Federal con sentencias por secuestro, serían recluidos en el Cefereso 14 de la ciudad de Gómez Palacio, con el fin de tener un mayor control con reos acusados por este delito. Este lugar opera desde el año 2014 y tiene una capacidad para 2 mil 520 internos.
¿Pero cuál es la preocupación de los duranguenses, en especial para los de la Comarca Lagunera? Lo que pasa es que no hay confianza por parte de la ciudadanía hacia el sistema penitenciario mexicano, ¿pero por qué?
Si hacemos memoria, hace algunos años, en 2010 para ser más precisos, recordará usted apreciable lector que cuando estaba la situación crítica por el tema de la guerra contra la delincuencia organizada, fue del dominio público la noticia de que se dejaba salir a algunos reos del desaparecido Cereso número 2 de Gómez Palacio, esto para realizar matanzas y crear terror entre la sociedad lagunera.
Por aquellos días ocurrieron diversos ataques en centros nocturnos tanto del lado de Torreón como en Gómez Palacio y Lerdo. La entonces directora del Centro de Readaptación Social número 2 fue detenida por estar implicada en permitir la salida de peligrosos criminales en vehículos oficiales y portando armas de uso exclusivo, a los que se les adjudicaron estos hechos sangrientos que mantuvieron atemorizados a los laguneros y pusieron de luto a muchas familias.
Por esos hechos registrados en la Comarca Lagunera en el año del 2010, el anuncio del Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, en enero de 2016, de que todos los presos consignados por el delito de secuestro fueran concentrados en el Cefereso número 14, los comarcanos se sintieron amenazados nuevamente por el temor de saber que en la región estarían radicando criminales de alta peligrosidad.
Por la experiencia vivida y la desconfianza en autoridades y hacia los propios sistemas de justicia y penitenciario, se hace entendible pues que la llegada de “El Tato” a este penal federal, esté alarmando a la ya de por sí intranquila ciudadanía de la región lagunera.
EN LA BALANZA.- El Secretario General de Gobierno, Adrián Alanís Quiñones, aseguró que no hay de qué preocuparse ya que el protocolo federal está muy bien definido en cuanto al tratamiento de reos de alta peligrosidad; sobre las extorsiones, asegura que estas no provienen de los penales del Estado…
CERROS SECOS Y PELONES… El gobierno de Durango debe trabajar a marchas forzadas en su intención de que Gómez Palacio y Lerdo no queden fuera del proyecto del Metrobús, ya que debe empezar a ejercer los recursos federales aprobados para no perderlos en forma definitiva, esto antes de que concluya el 2017. Casi 150 millones de pesos deben emplearse en las primeras obras de infraestructura, por los que entre la pasada administración y la actual ya se han otorgado cinco prórrogas y establecido multas por no haberlos ejercido.
Twitter: @Vic_Montenegro