infoinfusion 18 mayo, 2023 | Hace 3 años
La reserva maya de siete lagunas se adentra en el ecoturismo no masivo en el Caribe mexicano, buscando atraer a turistas interesados en la cultura, naturaleza e historia de este pueblo originario.

Daniel Andrés Reyes Pat y Zendy Euan Chan, guías comunitarios de la zona de Mayakaan, señalaron que durante un recorrido por el Sistema Lagunar Ocom, que consta de siete lagunas en la reserva comunitaria Much Kan Ka’ax (Juntos Cuidamos la Selva), mostraron cómo los campesinos de la región cuidan 1.235 hectáreas y promueven desarrollos ecoturísticos para su preservación.
La primera de estas lagunas se encuentra a pocos metros de la carretera federal que conecta Cancún con la capital de Quintana Roo, Chetumal.
Esta zona está ubicada a poco más de una hora de Tulum y frente a la zona de protección de la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an. Zendy Euan explica que el ejido Felipe Carrillo Puerto colinda con la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an y otros ejidos, destacando la importancia de la ubicación geográfica.
Además de ser guía, Daniel Andrés Reyes Pat es el encargado de Síijil Noh Há, un balneario local operado por un grupo de comuneros. Síijil Noh Há cuenta con seis cabañas para dos personas y una grande donde pueden hospedarse hasta 12 personas.
La electricidad de estas cabañas se obtiene mediante celdas solares y también ofrecen una zona de acampado.
En el centro ecoturístico, gestionan directamente las reservaciones y no trabajan con grandes agencias de turismo para mantener sus usos y costumbres. Además, se abastece de huertos cercanos para ofrecer ingredientes frescos en su restaurante.
El turismo que llega a la reserva maya de siete lagunas, en su mayoría, son turistas europeos que prefieren atractivos más naturales y se alejan del turismo masivo de Cancún y la Riviera Maya. A diferencia de estas zonas más populares, los visitantes valoran la falta de conectividad en la región, donde no hay teléfono ni internet en gran parte del área.
Los proyectos en esta zona promueven la llegada de pequeños grupos y actividades como paseos en kayak, ciclismo, senderismo interpretativo y monitoreo de aves, buscando preservar el entorno natural y cultural de la comunidad.