infoinfusion 27 septiembre, 2023 | Hace 2 años
En un sorprendente hallazgo científico, investigadores de las universidades de Oporto y Berna, en colaboración con el Instituto Max Planck de Antropología, han identificado la existencia de poblaciones humanas en el desierto de Namib, en Angola, que se creía habían desaparecido.

Utilizando avanzadas técnicas de análisis de ancestros genéticos, este equipo internacional de científicos descubrió en el genoma de las poblaciones mestizas de este inhóspito desierto rastros de un linaje ancestral profundamente divergente de cualquier otro conocido en nuestra especie.
La expedición científica, liderada por Jorge Rocha junto a los antropólogos angoleños Samuel y Teresa Aço, del Centro de Estudios del Desierto, se aventuró en la región remota y multiétnica del desierto de Namibia en busca de pistas en poblaciones modernas. En un asombroso giro de los acontecimientos, lograron localizar grupos étnicos que se creían extintos durante más de medio siglo, incluyendo a los kwepe, un grupo pastoril que hablaba una lengua llamada kwadi. Esta lengua ancestral compartía un ancestro común con las lenguas khoe habladas por otros grupos en el sur de África.
Este estudio revolucionario ha arrojado luz sobre la migración de poblaciones en la región. Los hablantes de khoe-kwadi, que se dispersaron en la zona hace aproximadamente 2,000 años, llegaron relativamente tarde en comparación con los primeros habitantes que hablaban lenguas khoe. Los bantúes, en contraste, llegaron aún más tarde desde África occidental y central.
Estos hallazgos demuestran la diversidad genética y cultural en el Namib angoleño, proporcionando una pieza crucial en el complejo rompecabezas de la historia de la humanidad y revelando que las poblaciones de esta región son únicas tanto en comparación con otras poblaciones modernas como entre sí.