infoinfusion 22 junio, 2023 | Hace 2 años
La interacción entre los animales a través de señales vocales y comportamientos ha sido objeto de estudio durante décadas por biólogos de todo el mundo. Sin embargo, decodificar y comprender estas formas de comunicación ha sido un proceso largo y complejo.
En este sentido, la inteligencia artificial (IA) ha surgido como una herramienta prometedora para analizar grandes conjuntos de datos y descifrar la comunicación animal.

El Earth Species Project (ESP), una organización sin fines de lucro, está trabajando en el desarrollo de un programa basado en IA que pueda interpretar estas señales y comportamientos, considerándolo como un proyecto con un enorme potencial de cambio.
El proceso de decodificación de la comunicación animal implica la grabación de sonidos y la observación de señales emitidas por los animales en diferentes situaciones. Los biólogos han utilizado diversas técnicas, como la grabación de vocalizaciones durante horas y la combinación de estas grabaciones con observaciones detalladas del comportamiento animal.
También se han empleado tecnologías más recientes, como los biologgers, dispositivos que registran datos como el sonido, la aceleración y el ritmo cardíaco de los animales.
Desde su inicio en 2017, ESP ha aprovechado los avances en el aprendizaje automático para analizar los datos almacenados en biologgers y combinar observaciones de comportamiento con señales de comunicación.
El objetivo principal del proyecto no es necesariamente comprender el “lenguaje” específico utilizado por cada especie, sino desarrollar una herramienta que permita a los biólogos reconocer y comprender las señales de comunicación emitidas por los animales en diferentes situaciones.
En esencia, se busca crear un algoritmo similar a un ChatGPT para animales, capaz de predecir las señales de comunicación en función del comportamiento animal, y viceversa. Aunque el proceso lleva tiempo, se destaca el progreso significativo en el reconocimiento de voz en los últimos años, lo que demuestra el potencial para comprender la comunicación animal de manera más efectiva y mejorar la conservación de la vida silvestre.
La creación de esta herramienta básica para comprender la comunicación animal tiene implicaciones significativas tanto para la conservación como para las interacciones entre los seres humanos y la vida silvestre.
Por ejemplo, el ESP ya está colaborando con investigadores de ballenas para analizar los sonidos de las belugas en el Río San Lorenzo, en Canadá, lo cual puede tener importantes implicaciones para su protección. Además, una mejor comprensión de la comunicación no humana puede revelar cómo las manadas de elefantes transmiten información entre sí, lo cual es crucial para proyectos de reintroducción de especies.
Sin embargo, es importante considerar los posibles abusos, como el uso de estas herramientas por parte de cazadores furtivos para atraer y capturar animales. Por lo tanto, es necesario sopesar cuidadosamente los beneficios y los riesgos asociados con el avance en la comprensión de la comunicación animal.