infoinfusion 19 junio, 2024 | Hace 1 año
En el vasto y diverso panorama del mundo prehispánico, destaca un tesoro poco visitado pero de gran importancia histórica y arquitectónica: Calakmul, una de las ciudades más impresionantes del Clásico Maya que ha permanecido en relativo anonimato frente a su famosa contraparte, Chichén Itzá.

Calakmul, bajo la dinastía de los Kaan, floreció desde el Preclásico Medio hasta el Clásico Tardío, entre el 551 a.C. y el 910 d.C., siendo un centro neurálgico de poder y cultura en su época. Su Gran Plaza, rodeada por monumentales estructuras como la pirámide más alta del sitio con 55 metros de altura, es testigo de su grandeza arquitectónica y social.
Sin embargo, su historia también revela los vaivenes de la política y la guerra en el mundo maya. En el siglo VI d.C., Calakmul y la poderosa Tikal protagonizaron conflictos bélicos que marcaron su devenir. Aunque Calakmul inicialmente triunfó, la historia tomó un giro con la victoria definitiva de Tikal en 695, marcando el inicio del declive para Calakmul.
El colapso de Calakmul, al igual que el de otras grandes ciudades mayas como Copán, Tikal y Palenque, está envuelto en el misterio del llamado “colapso de la civilización maya”. Este fenómeno, que también afectó a otros asentamientos mayas en el siglo IX, ha sido objeto de debate y estudio entre los expertos.
El significado mismo de Calakmul, “Dos Montículos Adyacentes”, evoca la majestuosidad de sus estructuras. Ubicada en la Reserva de la Biósfera de Calakmul, una de las más grandes de México, esta ciudad es un testimonio vivo de la grandeza maya con sus 120 estelas y su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 2002.
Si alguna vez te aventuras a descubrir los secretos de Calakmul, te espera un viaje en el tiempo lleno de historia y naturaleza, disponible de martes a domingo de 6 a 11:30 am por un costo de $95 pesos la entrada general.